Devocional para el viernes 18 de octubre, 2024
Matutina: Proverbios 3:13-22
Meridiana: Salmo 53
Vespertina: Proverbios 8:11,12
Hace algún tiempo, se publicó en un periódico de la región que se habían encontrado cerca de la costa de este estado yacimientos de piedras preciosas muy valiosas... Varias empresas
de origen extranjero habían hecho acto de presencia en nuestra región procurando obtener alguna ganancia de este tan preciado tesoro.
Esta nueva atrajo a investigadores que, basándose en sus estudios, daban explicaciones acerca del hallazgo, puesto que es una región en la que nunca se había encontrado tal cosa, solo piedras comunes…
Como estos investigadores, que con ahínco buscaban a mayores profundidades nuevos yacimientos de estas piedras preciadas, busquemos nosotros la sabiduría que viene de Dios. Esta es mejor que las piedras preciosas, y todas las cosas que se puedan desear no se pueden comparar con ella.
¿Cuál es tu deseo más anhelado? ¿Encontrar un yacimiento de oro fino? ¿Hallar una mina de piedras preciosas? Acaso ¿encontrar una lámpara maravillosa que pueda concederte tres o más deseos? Ninguna de estas aspiraciones se compara con la sabiduría.
Busquemos con porfía la sabiduría del cielo, esa que empieza con el temor de Jehová; esa que se alcanza guardando la ley de Dios muy profundamente en nuestro corazón. Todo lo que está debajo del cielo es vanidad. Procura alcanzar lo que es eterno y nunca se acaba.
BETTY SUNZA
Salmo 53
1 Dijo el necio en su corazón: No hay Dios. Corrompiéronse é hicieron abominable maldad: No hay quien haga bien.
2 Dios desde los cielos miró sobre los hijos de los hombres, Por ver si hay algún entendido Que busque á Dios.
3 Cada uno se había vuelto atrás; todos se habían corrompido: No hay quien haga bien, no hay ni aun uno.
4 ¿No tienen conocimiento todos esos que obran iniquidad? Que comen á mi pueblo como si comiesen pan: A Dios no han invocado.
5 Allí se sobresaltaron de pavor donde no había miedo: Porque Dios ha esparcido los huesos del que asentó campo contra ti: Los avergonzaste, porque Dios los desechó.
6 ¡Oh quién diese de Sión saludes á Israel! En volviendo Dios la cautividad de su pueblo, Gozarse ha Jacob, y alegraráse Israel.
Guía de oración: [Estados Unidos-Warsaw] y [Honduras-Quebrada De Arena]
Año Bíblico:
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